Ricardo Quesada C.
En la investigación analizaron un
estudio de cohorte (cantidad de personas o cosas de la misma clase), y cinco
estudios de casos y controles en humanos, ambos realizados para investigar el
vínculo entre teléfonos celulares y el glioma (cáncer del sistema nervioso
central).
Entre las conclusiones mencionan que "es
posible una interpretación causal entre la exposición a RF-EMF de teléfonos
móviles y el glioma", y otros estudios más pequeños apoyaron la conclusión,
pero para el neuroma acústico el cual es un tumor de crecimiento lento del
nervio que conecta el oído al cerebro.
Por otra parte, el equipo examinó más de 40 estudio a ratas y ratones.
Debido a la limitada evidencia en humanos y animales el equipo de trabajo
clasificó los campos electromagnéticos de RF como “posiblemente cancerígenos
para los humanos”, grupo 2B, esta categoría es
utilizada por la IARC cuando hay evidencia científica limitada en estudios en
seres humanos de que un compuesto aumenta el riesgo de cáncer en humanos y
cuando hay evidencia suficiente de un aumento en el riesgo de cáncer en
animales de experimentación.
La OMS dice que no hay riesgo. La Organización Mundial de la Salud, en
2019 dijo que “hasta la fecha, no se han confirmado efectos adversos para la
salud de la exposición de bajo nivel y a largo plazo a campos de
radiofrecuencia o de frecuencia industrial, pero los científicos continúan
investigando activamente esta área"
Además, se habla del proyecto EMF, el
cual, según la OMS, está abierto a todos los gobiernos de los Estados miembros,
es decir, departamentos de salud y/o representantes de instituciones
responsables de la protección de la radiación. Este proyecto es supervisado por
ochos organizaciones internacionales, ocho instituciones científicas
independientes y más de 50 gobiernos nacionales. El trabajo científico se
realiza en colaboración con la Comisión Internacional de Protección contra
Radiaciones No Ionizantes (ICNIRP)
Sin embargo, El Dr. Lennart Hardell, del
departamento de oncología de la Universidad de Örebro, en Suecia, dijo que
varios miembros del proyecto EMF son aliados de la industria y agrega “ser
miembro de ICNIRP es un conflicto de intereses en la evaluación científica de
los peligros para la salud de la radiación de RF a través de vínculos con el
ejército y la industria”, escribe el Dr. Hadrell. "Esto es particularmente
cierto, ya que las directrices de ICNIRP son de gran importancia para las
influyentes industrias de telecomunicaciones, militares y eléctricas".
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